lunes, 19 de febrero de 2007

El tipo más feo de California

Tom Waits es un tipo feo, de esos que asustan a los niños y los hacen llorar. Canta como lo hacen los borrachos irlandeses cuando corean abrazados canciones marineras y compone historias acompañadas de un piano beodo y una trompeta sorda. Tom se tatuó en el estómago el menú del restaurante en el que trabajaba y, un día, descubrió que la música es un gran cabaret en el que todo es vino y algun tutú que levantar para espiar debajo.

En Orphans (Brawlers, bawlers & bastards), el último 'tripledisco' de Waits, se desgrana la melancolía absurda de uno de los más grandes compositores de los últimos 30 años. Este tipo feo se calza las botas para componer tres obras llenas de barro, salpicadas por un blues que suena a óxido y a una fiesta con whisky destilado en un garaje.

Orphans
suena a Nueva Orleans y cientos de bares en los que la barra termina al final de un piano. Una obra personal, como siempre, en la que rezuma el olor a vinilo quemado. Waits se escuda en los medios tiempos y las lentas melodías para contar sus cuentos de carretera y burdel. El cabaretero por excelencia, el hombre que nació "con barba de tres día en la parte de atrás de un taxi", incluso se atreve a versionar a los Ramones y convertir The return of Jackie and Judy en un rock'n'roll sacado del pantano y que parece interpretado por cuatro paletos con camisa de franela y peto.

Aunque el tipo más feo de California sabe que si quiere llevarse a la chica lo que debe hacer es ponerse su vieja americana, su sombrero marchito y arrastrar sobre el teclado de un piano la canción más triste compuesta al norte del río Bravo. Un tío listo este Tom.

Tres imprescindibles:
-The return of Jackie and Judy
-Walk away
-You can never hold back spring

Para escuchar:

Tom Waits, Jitterbugboy, 1977

3 comentarios:

Miguel Carvajal dijo...

Enhorabuena. Un orgullo ser el primero en comentar en este blog, que promete con una entrada al mismísimo Waits y una prosa tan trabajada.

Grande el videoclip. Gracias.

Nahum dijo...

Ummm, esta prosa me suena, amigo.

Y me gusta. Me gusta.

Mi admirado asesor musical ya está "on the road".

Miguel Cane dijo...

Welcome to the Blogosphere, bebé.