sábado, 10 de marzo de 2007

El hombre que nunca estuvo allí

Si los tipos duros no bailan, Nick tampoco lo hacía. Nick Drake prefería la soledad de su cuarto, en el que sonaban Bach y Dylan. Nick caminaba cabizbajo desde su extrema altura y farfullaba palabras. Pero no bailaba, Nick no bailaba. Seguramente sus piernas, largas como las autopistas que cruzan Texas, se le hubieran enroscado y sus kilométricos brazos podrían haber abarcado a cientos de chicas bajo un único abrazo.

Nick era un joven raro, un hombre que nunca estuvo allí. Ni allí ni en ningún otro lugar. No era hablador, lo más probable es que fuese oscuro y con pocos amigos, un hombre sin aparente gracia -excepto para el atletismo- que caminaba encorbado, escondido bajo unos pantalones que no le llegaban a los tobillos y una chaqueta que enseñaba sus muñecas.

Llegó el año 68 y 'Five leaves left', una obra maestra del pop. El hombre que nunca estuvo allí surgía de la nada como una persona de extrema sensibilidad, con letras repletas de poesía y una capacidad sorprendente para crear un sonido acústico inconfundible y propio. Nick Drake se abría como una lata de conservas y dejaba escapar un mundo interior repleto de historias extrañas y agridulces.

Los tipos duros no bailan y Nick Drake compuso una obra para escuchar sentado junto a la ventana un día de lluvia, con una copa en la mano, mientras se cuentan las gotas que golpean contra el cristal. Una disco melancólico que suena como las tardes de domingo en otoño y a hojas caídas de un árbol solitario en un parque en el que los niños juegan a su alrededor cogidos de la mano y haciendo un corro.

Para escuchar:
'River man'

5 comentarios:

Miguel Cane dijo...

Ahhh, Drake.

Ni Anne, ni Nick, ni nadie somos culpables de este amor sin coincidencias.
Basta que encajen las piezas del corazón...

__________

Nick Drake y Anne Sexton: combo explosivo, darling.

Abrazos

Nahum dijo...

Grandísimo. Creo que la guinda a todo lo que cuentas es su voz. Una voz tranquila, de susurro, de confidencia, matizada.

A mí me emociona cada vez más. Ideal para viajes en coche largos... siempre que uno tenga en quien pensar.

Carlos de Vega dijo...

Bonita reseña. Los tipos demasiado blandos tampoco bailan, supongo.
Ah, y gracias por el link (soy el autor de lalunarosa.com).

Sincopado dijo...

Lo cierto es que Drake está a la altura de The Beatles, Dylan, Byrds... Es uno de los grandes, aunque quizás no sea tan conocido como se merece.

Nahum, siempre hay alguien en quien pensar, no nos engañemos.

Hormigo, gracias por tu visita y firma. Te felicito porque tu página sobre ND es realmente buena y cuidada.

Nahum dijo...

Yo también te felicito, Hormigo. Gracias a ti hemos descubierto aún más al gran Nick Drake. Bella página, sin duda, bella página.